La fase final de la Champions League podría sufrir un nuevo cambio a causa del coronavirus. El próximo campeón de la orejona se iba a definir en Lisboa entre el 12 y 23 de agosto, pero un nuevo brote de COVID-19 en la ciudad portuguesa, pone en riesgo los planes que tenía la UEFA para definir el campeonato.

El Gobierno de Portugal decretó este jueves el confinamiento de 19 de los 24 distritos de Lisboa debido a un rebrote en la capital lusa del COVID-19.

 El número de contagios en el país llegó a los 40.415, 311 casos más que lo registrado este miércoles, razón por la que el primer ministro, Antonio Costa, pidió que mayor control en la zona. De momento, las fronteras con España permanecerán cerradas hasta el 1 de julio.

La medida tomada por el Gobierno de Portugal pone en riesgo el nuevo formato de la Champions League, ya que Lisboa iba a ser la sede de la final a 8 el próximo mes de agosto, con el Estadio Da Luz como escenario para el último partido. La UEFA deberá estar al tanto de cómo evoluciona la situación en el país luso y decidir si habrá un nuevo cambio de sede.