La Policía noruega ha dispersado con gases lacrimógenos una manifestación contra el Islam celebrada este sábado cerca de la sede del Parlamento nacional en la capital del país, Oslo

La Policía noruega ha dispersado con gases lacrimógenos una manifestación contra el Islam celebrada este sábado cerca de la sede del Parlamento nacional en la capital del país, Oslo.

Al mismo tiempo se había convocado una contraprotesta con cientos de personas al grito de “No a los racistas en nuestras calles” en referencia a los organizadores de las protestas, el grupo Alto a la islamización de Noruega (SIAN).

Las tensiones aumentaron entre los varios cientos de contramanifestantes cuando una miembro de SIAN arrancó páginas del Corán y las escupió, informó la agencia de noticias NTB. “Mira, ahora voy a profanar el Corán”, ha declarado la mujer, Fanny Braten.

Braten, que había sido acusada y absuelta anteriormente por discurso de odio, escapó ilesa después de que un contramanifestante la pateara en la pierna y lograra romper las vallas de seguridad y los cordones policiales, según el diario de Oslo VG.

La Policía, en ese momento, tuvo que lanzar gas lacrimógeno y gas pimienta como parte de su esfuerzo por mantener separados a los grupos rivales. Ante la perspectiva de un agravamiento de los incidentes, los agentes suspendieron la manifestación de SIAN antes de lo programado y sacó a los partidarios de SIAN del lugar.

Cuatro personas que intentaron interrumpir la protesta de SIAN han resultado detenidas, según los medios noruegos.

La gran presencia policial se produjo después de que el líder de SIAN, Lars Thorsen, fuera atacado hace una semana durante una protesta similar en la ciudad occidental de Bergen.

El Consejo Islámico de Noruega, así como Abid Raja, ministro de Cultura, habían instado anteriormente a la gente a mantenerse alejada de la protesta SIAN del sábado y no participar en contraprotestas para evitar una escalada de tensiones.