El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, señalado de estar alineado con el chavismo, ha certificado este jueves la reelección del presidente Nicolás Maduro para un tercer mandato de seis años, en medio de acusaciones de fraude por parte de la oposición.
La Sala Electoral del TSJ declaró como “inobjetable” el material electoral revisado y validó los resultados de la elección presidencial del 28 de julio de 2024, en la que Maduro fue proclamado ganador por el Consejo Nacional Electoral (CNE). Según la sentencia leída por Caryslia Rodríguez, presidenta de la corte, Maduro asumirá el cargo para el período constitucional 2025-2031.
Esta decisión responde a una solicitud hecha por el propio Maduro hace tres semanas, tras las críticas que surgieron sobre la transparencia de su reelección. Su principal contrincante, Edmundo González Urrutia, quien representaba a la líder opositora inhabilitada María Corina Machado, había denunciado un supuesto fraude electoral.
El CNE proclamó a Maduro como vencedor con un 52% de los votos frente al 43% obtenido por González Urrutia, pero no presentó un desglose detallado del escrutinio, argumentando que el sistema de votación había sido jaqueado. A pesar de esto, el TSJ instó al CNE a publicar los “resultados definitivos” de las elecciones, aunque no exigió un detalle completo del conteo.
Por su parte, la oposición ha rechazado la decisión del TSJ, adelantando que considerarán “nula” la sentencia, en un nuevo episodio que agrava la crisis política en Venezuela.