Max Verstappen, tricampeón del mundo de Fórmula Uno y actual líder del Mundial, expresó su preocupación por el rendimiento del coche de Red Bull tras finalizar en sexto lugar en el Gran Premio de Italia. El neerlandés, que ha dominado gran parte de la temporada, advirtió que si no se realizan cambios significativos, Red Bull corre el riesgo de perder ambos campeonatos.

“Si seguimos así, perderemos los dos campeonatos”, afirmó Verstappen, quien ha ganado siete de las diez primeras carreras del año, pero solo ha subido al podio en dos de las últimas seis. A pesar de liderar el campeonato con 303 puntos, 62 más que Lando Norris (McLaren), Verstappen destacó la necesidad de mejoras urgentes en el coche.

En el campeonato de constructores, Red Bull mantiene una ventaja de solo ocho puntos sobre McLaren, con Ferrari en tercer lugar, 39 puntos por detrás. La preocupación de Verstappen se centra en el hecho de que, tras haber dominado la temporada anterior, el equipo ahora enfrenta una competencia mucho más cerrada.

“Tenemos que trabajar duro y cambiar muchas cosas en el coche, porque si no, lo perderemos todo”, advirtió el piloto de 26 años, que ha ganado 61 veces en la F1. Aunque confía en su capacidad para motivar al equipo, Verstappen subrayó que no puede diseñar el coche y que los problemas recientes son un reflejo de la necesidad de ajustes técnicos.

El fin de semana en Monza fue difícil para Red Bull, con problemas en la calificación y en la carrera. Un mal ‘pit stop’ y la falta de potencia limitaron las opciones de Verstappen, quien reconoció que la estrategia de dos paradas no fue óptima y que todo se redujo a “limitar daños hasta el final”.

“Ahora, lo que hay que hacer es trabajar duro para intentar regresar al lugar al que queremos”, concluyó Verstappen, señalando que las próximas dos semanas antes del Gran Premio de Bakú serán cruciales para solucionar los problemas identificados y mantener la ventaja en el campeonato.