El presidente Andrés Manuel López Obrador rechazó haber negociado con la familia Yunes para obtener el voto que permitió la aprobación de la Reforma Judicial en el Senado. Tras la alianza entre los senadores panistas veracruzanos Miguel Ángel Yunes Márquez y su suplente, Miguel Ángel Yunes Linares, con Morena para apoyar la enmienda, López Obrador aclaró que no hubo ningún acuerdo con los Yunes.
En su conferencia matutina, el mandatario se deslindó de lo que se calificó como un “pacto de corrupción” y afirmó que los legisladores votaron de manera libre. “Yo estoy satisfecho con la aprobación de la reforma judicial”, señaló.
López Obrador admitió tener diferencias con Yunes Linares, pero subrayó que en la política “siempre hay que optar entre inconvenientes y buscar el equilibrio entre la eficacia y los principios”. Ante las preguntas sobre una posible negociación con los Yunes, el presidente insistió: “No se negoció nada, absolutamente nada”. Añadió que los conservadores y sus voceros creen que su gobierno actúa de la misma manera que los anteriores.
La Reforma Judicial fue aprobada con 86 votos a favor, incluyendo el de Yunes Márquez, y 41 en contra de senadores panistas, priistas y de Movimiento Ciudadano. Tras la votación, la iniciativa fue enviada a los congresos locales, siendo el Congreso de Oaxaca el primero en ratificarla.