En un movimiento que sorprendió a muchos, la presidenta Claudia Sheinbaum decidió rescatar del limbo del desempleo al ex gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, y lo nombró director del Centro Nacional de Control del Gas Natural (CENAGAS), un puesto secundario bajo la Secretaría de Energía.
El nombramiento, que tomará efecto el 6 de enero, parece más un “regalo de Reyes” para el ex mandatario, aunque muchos en Veracruz aseguran que habrían preferido verlo al frente de la Dirección General de Asuntos sin Importancia (DGASIM) o en la Coordinación de Políticos Holgazanes (COPOHO).
El anuncio, que llegó como un balde de agua fría, causó sorpresa en García Jiménez, quien tardó tres horas en agradecer a la presidenta a través de redes sociales, demostrando quizás un poco de desconcierto ante la magnitud de la responsabilidad que se le viene encima.
Y es que, aunque el CENAGAS tiene la misión de garantizar el abasto y transporte seguro del gas natural en México, muchos se preguntan si Cuitláhuac tiene idea de lo que implica liderar tal “monstruo” energético.
Lo curioso es que, en lugar de celebrar, políticos como Sergio Rodríguez, conocidos por sus vínculos con la corrupción, literalmente pedían en WhatsApp que se felicitara al nuevo titular, recordando sus “elogiosas” gestiones pasadas. Mientras tanto, los veracruzanos se resignan a que, al menos, Cuitláhuac tendrá un trabajo… aunque no sea muy relevante.
¿Será este el principio de una nueva era en CENAGAS o simplemente un nuevo capítulo de política a la mexicana? El tiempo lo dirá.