Esto ha permitido conocer cómo era la vida antes del contacto con los conquistadores y misioneros españoles durante los siglos XVI y XVII, así como impulsar la ubicación de sitios estratégicos.
Uno de estos es la Zona Arqueológica Cerro de Trincheras que se encuentra en el municipio del mismo nombre, ubicado a cerca de 240 kilómetros de Hermosillo”, informó el antropólogo José Luis Perea González.
El delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (Inah) en el Estado detalló que esta zona arqueológica está abierta al público desde el 2011, y consta de una ciudad prehispánica de aproximadamente 100 hectáreas.
A través de un centro de interpretación y de andadores para su recorrido, quienes la visiten, tienen la posibilidad de apreciar lo que significa el sitio más impactante en Sonora, desde el punto de vista de su monumentalidad.
La Zona Arqueológica Cerro de Trincheras no cerrará por las fiestas decembrinas. Invitamos a realizar una llamada previa para asegurar que no existan situaciones de contingencia que impidan las visitas, como lo puede ser una lluvia”, Rogelio León, encargado de la Zona Arqueológica.
Patrimonio arqueológico
La cultura de trincheras fue muy extensa geográficamente, pues existió en los lugares que hoy conforman Chihuahua, Nuevo México, Sonora y Arizona, informó el titular del Centro Inah Sonora.
En toda esta región el sitio más grande y emblemático lo tenemos en Sonora a través de esta zona arqueológica” destacó.
Esta zona fue el centro regional de las aldeas del valle medio del río Magdalena, en el cual realizaban actividades de la vida cotidiana, como ceremonias, pero que además también se considera su posible uso como lugar de defensa.
Cuenta con tres estructuras sobresalientes: La Cancha, un área comunal, El Mirador, que con evidencia arqueológica se determinó su ocupación por un grupo de élite, y la Plaza Caracol, ubicada en la cima del cerro, y que fue de uso restringido y ritual.