Las deficiencias de Pumas femenil quedaron al descubierto apenas en la primera jornada del torneo Clausura 2020 al caer por goleada 0-3 ante un Puebla que se respaldó en la delantera Mirelle Arciniega. Después de dos años y medio con la entrenadora Ileana Dávila, las felinas enfrentarán uno de los semestres más complicados al carecer de refuerzos pese a los grises resultados del torneo pasado.
No se inició la temporada como debíamos, estamos molestos. Puebla hizo un buen trabajo y nosotros no metimos ni las manos, fue un muy mal juego nuestro, reconoció Dávila.
La escuadra varonil de los Pumas hizo una limpia al dar de baja a 10 jugadores, entre ellos Martín Rodríguez, y reforzarse con Johan Vásquez, Leonel López y Alejandro Mayorga, al tiempo que el plantel femenil ni siquiera hubo contrataciones para este certamen aun cuando en la temporada pasada apenas alcanzaron 19 unidades y se quedaron fuera de la liguilla.
Ileana Dávila dijo que están en la búsqueda de un elemento para completar al plantel y explicó que la ausencia de refuerzos hasta ahora se debe a que el proyecto del club está enfocado en darle seguimiento a varias de las jugadoras que han estado en el equipo desde que se inició el torneo femenil.
La directora técnica dejó claro que aunque en el duelo ante Puebla se cometieron varios errores confiamos en estas futbolistas, sé que van a dar la cara porque tienen mucho talento.
En contraste, los cambios sí se realizaron en el cuerpo técnico, luego de que fue destituida Teresa Campos, entrenadora de porteras y con amplia experiencia en el balompié amateur, así como la preparadora física Bárbara Ramírez.
“La directiva decidió que no continuaran en el plantel. Ahora nos apoyan tres entrenadores de porteros. Confiamos plenamente en ellos. En la parte física, llegó Alejandro Rodríguez Rivera, indicó Dávila.