Capistrán añadió que al cierre de 2019, con los indicadores disponibles hasta el momento, es posible que el año pasado la economía mexicana haya tenido un crecimiento negativo.

Ante la debilidad del crecimiento económico de México, se presente una baja en la calificación de México por parte de las agencias internacionales; sin embargo, descartó que se pierda el grado de inversión.

Así, explicó que Moody’s podría ser la próxima calificadora en reducir la nota crediticia de México, ya que es la firma que la tiene más alta, en A3 con perspectiva negativa. En consecuencia, quitaría el grado de inversión a Pemex, tal y como lo hizo Fitch Ratings en 2019.

Para la primera mitad del año, Capistrán estimó que prevalezca la fortaleza del peso observada en semanas recientes; sin embargo, al cierre de 2020 se espera un repunte a 21.2 pesos por dólar.

En el caso de la inflación, el especialista añadió que Enero tendrá un rebote por el aumento en el salario y alza en cuotas e impuestos en varios estados, con lo que regresará a 4% al cierre 2020.

Preocupa el bajo crecimiento
Capistrán dijo que la baja inversión puede llevar a México a que se reduzca su potencial de crecimiento, donde incluso el promedio de crecimiento de los próximos años quede por debajo de 2%.

Para el especialista, además de las condiciones de certidumbre que deben de presentarse en las políticas públicas del país, también dependerá del comportamiento de la economía de Estados Unidos.