Niza, Francia. Tres personas murieron y otras más resultaron heridas en un ataque cometido en la basílica de Notre Dame, en Niza, al sur de Francia.
El presidente, Emmanuel Macron, tachó de “ataque terrorista islamista” el asesinato perpetuado por un tunecino de 21 años, quien, al ser detenido, repetía la frase “Allahu Akbar” (Dios es Mayor).
El mandatario anunció que aumentará el número de elementos destinados a “Centinela”, una operación militar de vigilancia antiterrorista.
El ataque con cuchillo que causó tres muertos en una iglesia provocó reprobación e indignación en el mundo, y muchos países expresaron su solidaridad con Francia, como Arabia Saudita, que “condenó enérgicamente” los hechos, mientras que la Embajada francesa en Riad instó a sus nacionales en Arabia Saudita a ejercer una “vigilancia máxima”.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó su solidaridad con Francia y exigió el cese “inmediato” de los “ataques terroristas” después del atentado.
“Nuestros corazones están con el pueblo de Francia. Estados Unidos está con nuestro aliado más antiguo en esta lucha”, tuiteó Trump.
“Estos ataques terroristas islamistas radicales deben cesar de inmediato. ¡Ningún país, ni Francia ni cualquier otro país, puede soportarlo durante mucho tiempo!”
Condena la ONU este “ataque atroz”
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, “condena firmemente el ataque atroz” ocurrido hoy en Niza, en el cual murieron varias personas, declaró en Nueva York su portavoz, Stéphane Dujarric.
Guterres “reafirma la solidaridad de Naciones Unidas con la población y el gobierno de Francia” durante esta prueba, añadió durante su rueda de prensa diaria.
En un comunicado, el Alto Responsable de Naciones Unidas por la Alianza de Civilizaciones, Miguel Ángel Moratinos, condenó “el ataque bárbaro” en Niza.