ESTESSUR
RAÚL DOMÍNGUEZ
Al final de su discurso, el diputado federal por el Estado de México, Sergio Gutiérrez Luna dijo a sus dos mil acarreados en Minatitlán con motivo de su primer informe celebrado ayer, que el 31 de agosto concluirá su periodo como presidente de la Cámara Baja y anticipó que en los dos años restantes tendrá más tiempo para continuar cercano a sus paisanos en Minatitlán y en todas las regiones de Veracruz bajo el principio de “Servir Para Transformar”.
De acuerdísimo, sólo que ya no dispondrá de los recursos de ese ente legislativo para cubrir su promoción mediática ni para seguir “comprando” afectos, sonrisas, abrazos y “cachondeos” en eventos multitudinarios, en aras de venderse como un alma de Dios en su sueño guajiro de ser candidato de MORENA la gubernatura veracruzana.
El 31 de agosto, Gutiérrez Luna deberá entregar cuentas claras acerca de cuánto se gastó en sus frecuentes apariciones en medios de comunicación y para que la cuña apriete, un elevado número de diputados morenistas, ya se preparan para demostrarle que como abogado es un pésimo administrador y que el manejo de recursos, no es ni por accidente, una de sus virtudes.
Ya veremos si a partir del 01 de septiembre, seguirá en su papel de peregrino por todo el estado de Veracruz, vendiendo ilusiones y regalando lo que no es suyo, como lo hizo en estos últimos 12 meses, siendo cuestionado acerca del origen del dinero que destinó a su promoción personal. Otra de las opciones, será que sus aliados de papel o de mentiras acepten un pase de charola, cuestión inviable, si saben que su inversión no la podrán recuperar.
Y lo último, aunque con posibilidades remotas, es que, por ese repentino amor a Veracruz que le surgió cuando vio burro y se le antojó viaje, destine su dieta de 200 mil pesos mensuales a la compra de “conciencias”, espacios audiovisuales, viajes aéreos y banquetes, ante su testaruda idea de una candidatura a la que definitivamente llegó tarde.
Por lo pronto un sano consejo a todos los dueños y representantes de medios de comunicación “engutierrados”: tienen 15 días para que los operadores de prensa de Gutierritos les cubran la promoción de su pomposo informe, porque después, es muy posible que no encuentren a sus acreedores ni en el Punto Nemo.