Boca del Río, Ver. La última vez que su familia supo de Cintamani Meztli Castillejos Sánchez fue el pasado 19 de agosto de este 2022, cuando la joven antropóloga de 34 años le llamó a su madre para decirle que iba a una entrevista de trabajo a un café.

Después, no la volvieron a ver con vida. El día 21, de ese mismo mes, guardavidas de la ciudad de Boca del Río la encontraron sin vida, en playas de Costa de Oro, justo atrás de un casino.

Junto a ella había una bolsa con ropa y estaban tiradas varias jeringas, es por eso por lo que en redes sociales presumieron que había muerto de una sobredosis. Sin embargo, sus seres queridos niegan que ella estuviera en malos pasos, mucho menos que tuviera alguna adicción.

Al contrario, revelan que era introvertida y se la pasaba leyendo libros desde que era una niña antes que jugar con sus primos. Su familia es originaria de Naolinco, por lo que no sabían que había fallecido, la habían reportado sólo como desaparecida en Xalapa, ante la Fiscalía Especializada.

Apenas el 31 de agosto es que relacionaron las notas periodísticas que encontraron sobre la muerte de una mujer en playas de Boca del Río y al acudir a las autoridades, uno de sus tíos la identificó en las fotografías del sistema confirmando su muerte.

Beatriz Vizcarra López, tía de la víctima, ofreció una entrevista para limpiar el nombre de su sobrina. Ella asegura que no era viciosa, ni refresco tomaba. Estaba enfocada a estudiar y conseguir trabajo.

Narró que Cintamani Meztli tenía algunos días que había llegado de Naolinco a vivir con su padre al Fraccionamiento Reforma de Veracruz, él tuvo que regresar a Estados Unidos a trabajar y la dejó aquí en lo que encontraba un empleo como traductora.

La chica era antropóloga de profesión y hablaba tres idiomas, por lo que andaba en busca de una oportunidad laboral dentro de ese ámbito, es por eso que un par de días antes de su desaparición le marcó a su mamá para contarle que tendría una entrevista en un café, pero nunca mencionó cuál ni dónde.

Luego de esto no supieron de ella, le marcaban a su celular, pero no contestaba, así que decidieron denunciar su desaparición, sin saber que ella ya había sido localizada sin vida.

Uno de sus tíos declaró que las autoridades dicen que junto a su cuerpo había una pequeña maleta con ropa y las jeringas, pero calificó de ridículo pensar que iba a viajar, porque en la pensión que vivía dejó hasta las ventanas abiertas.

Además, que, reiteró que la joven no tenía adicciones, por lo que sospecha que le pudieron inyectar sustancias para llevársela ese 21 de agosto. Fuente: Urbis Veracruz.