*El alcalde Noé Castillo Olvera posicionó a Agua Dulce como cuna de la cultura en el sur de Veracruz

El cierre del festival “Celebrando la vida y la muerte” que se desarrolló del 31 de octubre al 02 de noviembre, convocó la noche del miércoles a más de 150 catrinas y catrines; evento en el que se recreó la cosmovisión de nuestros pueblos ancestrales y de la época colonial, prevaleciendo la creatividad en sus caracterizaciones.

Al encabezar este programa cultural, el alcalde Noé Castillo Olvera agradeció la participación de los jóvenes en su mayoría estudiantes, pertenecientes al ballet folclórico “Raíces”, que presentaron bailables autóctonos y de la época colonial, así como a las catrinas y catrines que concursaron por el primero, segundo y tercer lugar.

En este colorido festival que incluyó el concurso de Catrinas y Catrines participaron desde niñas y niños de cuatro años hasta adultos mayores, cuya creatividad en el maquillaje e indumentaria dificultó el trabajo del jurado calificador al momento de definir a las y los ganadores de esta competencia.

El Festival “Celebrando la vida y la muerte” durante tres días, atrajo como jamás en la historia de Agua Dulce, el interés de cientos de jóvenes, mujeres y hombres, por participar en esta que es una de las celebraciones ancestrales más coloridas y creativas de México.

Una vez más, el gobierno del profesor Noé Castillo Olvera marca la pauta en la región, para posicionar a la ciudad como cuna de la cultura en el sur de Veracruz.