Este miércoles el edificio El Olmo, que fuera sede del Tribunal Estatal de Justicia Administrativa de Veracruz, amaneció custodiado por un grupo de policías estatales, tras la advertencia de magistrados cesados, que hoy se presentarían a su centro de trabajo, en virtud que la Suprema Corte de Justicia de la Nación frenó el nombramiento de los nuevos integrantes del Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Veracruz (TRIJAEV), un invento de los despistados diputados locales.
La presencia de los jenízaros de la Secretaría de Seguridad Pública inhibió a los magistrados Roberto Alejandro Pérez Gutiérrez, Pedro José María García Montañez, Luisa Samaniego Ramírez y Estrella Alhely Iglesias Gutiérrez ingresar al edificio, en donde hasta hoy es legalmente su centro de trabajo. Los jurisconsultos se quedaron en las afueras, imprimieron videos y se retiraron, para seguir dando la batalla ante la SCJN, instancia que les otorgó medidas cautelares.
Es importante resaltar que la determinación de la Legislatura Local de desaparecer el Tribunal Estatal de Justicia Administrativa de Veracruz, por el Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Veracruz (TRIJAEV), que en apariencia pudiera ser la misma gata, nada más que revolcada, fue objeto de una controversia constitucional interpuesta por los magistrados destituidos.
Este instrumento legal analizado por la Comisión de Receso de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), avanzó a tal grado que el máximo órgano del país en esta materia tuvo que frenar el nombramiento de nuevos magistrados; un regalito de navidad que hasta nuevo aviso no podrán estrenar.
Por lo pronto el edificio El Olmo se convirtió en la casa de los pitufos, por el azul intenso de la policía estatal.