*Amenazan con tomar las instalaciones ante la torpeza de su director Walter Saiz
La retención de salarios hasta por 72 horas en el Instituto Tecnológico Superior de Xalapa (ITSX) ya se hizo costumbre a ciencia y paciencia de su irresponsable director Walter Saiz González, esto ocurrió nuevamente hoy cuando los empleados sindicalizados y de confianza con tarjeta de Banamex consultaron su saldo, resultó pasadas las 19:00 horas no les habían pagado.
Desde distintas redes sociales, maestros, personal administrativo y de intendencia lanzaban rayos y centellas en contra del funcionario y sus secuaces, quienes ellos sí, no tuvieron problemas para cobrar en tiempo y forma.
Explicaron que el grueso de la nómina del ITSX cobra a través de Banamex y “los jefes y barberos del director vía Bancomer y ellos si, desde antes del mediodía ya tenían su pago reflejado”.
Los inconformes condenan la actitud del director, quien puso en manos de personal irresponsable la dispersión de salarios ¿O lo hará con alevosía y ventaja para demostrar que tiene muchos riñones y que por ser influyente nadie le puede alzar la voz? Como sea, los indignados trabajadores podrían paralizar actividades mañana, para exigir la inmediata remoción de Saiz González.
Revelaron que por la vía telefónica se comunicaron con ejecutivos del área de nómina Banamex y les informaron que su sistema no ha presentado fallas, como mañosamente argumentaron funcionarios del área administrativa del referido tecnológico. En pocas palabras, la institución bancaria se deslindó de estos hechos.
Hace un mes, se presentó un problema similar y de no haber sido por la presión de la representación sindical, la retención de salarios se habría prolongado. Aquella ocasión reunidos en el auditorio, Saiz González salió entonces con su “cara de papa” ladinamente a disculparse y a reconocer errores de informática en el área administrativa, hoy la historia se repite ¿De qué se trata?
Ojalá que el Secretario de Educación, Zenyazen Escobar García, antes que solicite licencia, haga justicia a los más de 350 trabajadores y que lo último que haga, sea poner de patitas a la calle al director y su caterva de inútiles.