Volvo, el gigante automotriz sueco, ha anunciado una significativa inversión de 700 millones de dólares para establecer una planta de producción de tractocamiones en Monterrey, Nuevo León. La planta, que se ubicará en el municipio de Ciénega de Flores, a unos 40 kilómetros al norte de Monterrey, será clave para la producción de vehículos convencionales de servicio pesado para las marcas Volvo y Mack.
El gobernador de Nuevo León, Samuel García, celebró la noticia a través de sus redes sociales, destacando que esta será una de las inversiones más importantes del sexenio y que generará inicialmente 2,500 empleos. García subrayó que la llegada de Volvo refuerza el liderazgo de Nuevo León como un destino atractivo para la inversión extranjera.
Según el comunicado emitido por Volvo, la proximidad de Monterrey a la frontera con Estados Unidos es un factor decisivo para la elección de la ubicación, ya que ofrece importantes eficiencias logísticas que respaldarán las ventas en las regiones suroeste y oeste de Estados Unidos, así como en México y América Latina. Además, la infraestructura bien desarrollada de la ciudad facilita la construcción de un ecosistema maduro de suministro y producción.
La nueva planta será una instalación completa de ensamblaje de vehículos convencionales, que incluirá la producción de carrocerías de cabina y pintura. La planta se construirá en un terreno de 93 hectáreas, con una superficie de 1.7 millones de pies cuadrados (aproximadamente 15.79 hectáreas).
Este anuncio llega en un momento crucial para Nuevo León, ya que recientemente Tesla suspendió la instalación de su armadora en el estado. Aunque no ha habido un aviso formal por parte de Tesla sobre la suspensión, el gobierno de Nuevo León ha expresado su comprensión y respeto hacia cualquier ajuste en el cronograma de trabajo de la compañía. La suspensión se debió a preocupaciones sobre posibles aranceles que podrían ser impuestos a los vehículos fabricados en México por el candidato presidencial estadounidense Donald Trump.
Con la llegada de Volvo, las autoridades estatales ven un resurgir de la esperanza en el sector automotriz de la región, consolidando a Nuevo León como un centro clave de producción e inversión en la industria automotriz global.