El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha enviado un mensaje contundente al mundo empresarial y político al tomar medidas unilaterales que afectan a los aeropuertos privados del país. Aunque se acerca el final de su mandato y las elecciones presidenciales de 2024 están en el horizonte, AMLO no se detiene en su plan de ejecutar grandes proyectos de infraestructura.
En una acción que sorprendió a los mercados, el gobierno de México modificó la estructura de tarifas de los aeropuertos privados, lo que provocó una caída de hasta el 44% en las acciones de los operadores aeroportuarios en la bolsa de valores. Esta decisión se suma a una serie de intervenciones que han irritado al sector privado durante su mandato.
La relación de AMLO con la industria de la aviación ha sido tensa desde la cancelación de un nuevo aeropuerto planeado para Ciudad de México. Ahora, los cambios en las tarifas afectarán a todo el sistema tarifario, lo que podría ayudar al gobierno a financiar sus costosos proyectos antes de que termine su mandato.
A pesar de la incertidumbre en los mercados, el presidente goza de una alta aprobación y una economía en crecimiento. Sin embargo, los inversionistas están preocupados por las próximas acciones de AMLO en su último año en el cargo, ya que esta medida ha generado dudas sobre el respeto a los contratos.
Aunque algunas acciones se recuperaron después de la caída inicial, la situación sigue siendo volátil. Los cambios en las tarifas aeroportuarias podrían no ser tan severos como se temía, según fuentes. Esto ha creado una “brillante oportunidad de inversión”, según analistas.
La relación entre el gobierno y el sector empresarial sigue siendo un tema importante a medida que México se acerca a un período de transición política y económica.