La iniciativa para modificar la Ley Reglamentaria del Servicio Ferroviario desincentiva la intención de crear una empresa del sector que atienda a los tres países que forman parte del Tratado México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC), advierte Oscar del Cueto, presidente de Kansas Ciudad Sur de México (KCSM).
La matriz de esta compañía, Kansas City Southern (KCS) está por decidir si se une con Canadian Pacific Railway o con Canadian National Railway, dos empresas canadienses que buscan, a través de la fusión, prestar servicios ferroviarios en los tres países de Norteamérica para impulsar el intercambio comercial en el acuerdo internacional.
El 22 de marzo, Canadian Pacific Railway (CP) presentó una oferta de fusión en la que pagaría 29 mil millones de dólares a KCS para consolidarse en una empresa con una red de 32 mil kilómetros entre México, Estados Unidos y Canadá.
Un mes después, Canadian National Railway (CN), la competencia directa de CP, presentó una oferta alternativa en la que ofreció mil millones de dólares adicionales por el control de la ferrocarrilera.
Kansas City Southern dijo en un comunicado en abril que está analizando las dos ofertas para definir por cuál se incluyen los accionistas.
“Una postura en este sentido de un ferrocarril que una en los tres países es que este tipo de iniciativas (de reforma) manda una señal equivocada. Esta iniciativa no incentiva esta parte de inversión de hacer un ferrocarril de Norteamérica, por eso hablamos de que ojalá podamos tener un diálogo abierto en el que legisladores, gobierno federal y nosotros podamos discutir este tipo de temas para no mandar señales equivocadas ”, Dijo Del Cueto en entrevista con El Sol de México.
La propuesta de reforma, que ya fue aprobada por el Senado de la República, buscar reducir los periodos de concesión ferroviaria de 50 a 35 años, así como darle la facultad a la Autoridad Regulatoria de Transporte Ferroviario (ARTF) para poner topes a las tarifas que cobran las empresas por sus servicios.
El empresario asegura que los cambios en las reglas del juego ver los planes de inversión del sector a nivel internacional, aunque reconoce que todavía es muy pronto para definir el futuro de la fusión.
“En este momento diría que no, porque no está aprobada (la reforma). Es un primer paso que se da pero no lo vería así. Si vas a tener que hacer inversiones bajo reglas distintas y un plazo menor de concesión, sí, obviamente afectaría (la fusión de KCS) ”.