Raúl Domínguez/FirmasMx

Ante el escozor que causó a muchos al interior y fuera de MORENA, la decisión del Órgano Público Local Electoral (OPLE) de incluir a Juan Javier Gómez Cazarín como diputado plurinominal para la LXVI Legislatura Local, además de dos mujeres y un “no binario”, fue el propio legislador quien salió al paso de los ataques a su persona.  

“Nunca, pero nunca una agresión a una mujer, nunca”, posteó anoche en su cuenta de Facebook, para agregar:  

“Respeto ante todas las cosas, y no hay bronca, estoy acostumbrado a que siempre me quieran manchar; me han tratado de asesino, de fraudes, de todo, pero nunca comprobarán nada, porque nunca le he faltado a nadie” y remachó:  

“Mis acciones siempre son de frente, sin pelos en la lengua, han sido tan cobardes que se esconden para denigrarme… cobardes; pero aquí sigo siendo, CARÓN , GAMBA, CAZARÍN, el boliche. Y no el diputado, eso para mí pasa hasta lo último”. 

En este post, concluye con una frase del poema A Gloria de Salvador Díaz Mirón:  

Hay plumajes que cruzan el pantano 
y no se manchan… ¡Mi plumaje es de esos!

Gómez Cazarín ha recibido el respaldo de la dirigencia nacional y estatal de su partido, luego de la determinación del OPLE de considerarlo dentro de la lista de diputados plurinominales para la próxima legislatura local. 

Sin embargo la “rechoncha” mano de un presunto acusado de violación, que tiene “patas pa’rriba” los programas federales, es la que mece la cuna y el siniestro personaje se ha convertido en el mecenas de las “inconformes”, empero, en términos jurídicos: “dura lex, sed lex”.