- Los jurisconsultos enderezarían una demanda en contra del Ayuntamiento y de la CFE.
- Al analizar a fondo, se configuran varios delitos y muchos responsables.
Jorge Carreño Figueras/Agencia Infored
Veracruz, Ver. Abogados de Bryan Emmanuel, quien falleciera ayer de una descarga eléctrica, al no percatarse que un registro de CFE estaba sin tapa, se pusieron a las ordenes de la familia para proceder en contra de quien resulte responsable y en una de esas, hasta el Ayuntamiento que preside Fernando Yunes Márquez podría resultar salpicado.
Como se confirmó, ayer Bryan Emmanuel de 13 años de edad caminada sobre la confluencia de José Vasconcelos y Gabriela Mistral del fraccionamiento Chivería y al pasar por un registro sin tapa se fue al vacío, sufriendo una descarga eléctrica severa.
Vecinos reportaron que días antes unos tipos -amantes de lo ajeno- fueron vistos robando las tapas metálicas y pese a que reportaron el hecho ante el Ayuntamiento y CFE, ninguna autoridad intervino.
El pequeño esperaba a que su madre llegara de trabajar para que le diera como cada noche, unos pesos para comprar un refresco y dulces en la tienda de la esquina, sin imaginar lo que le sobrevendría. Narran vecinos que el adolescente ya regresaba “cuando el registro de CFE se lo tragó”.
Una ama de casa se dio cuenta y corrió la voz de alarma para rescatar al pequeño, llegando minutos después elementos de la Cruz Roja, quienes con un desfibrilador trataban de salvarle la vida, en tanto avanzaban hacia el área de emergencias del IMSS. Lamentablemente los médicos nada pudieron hacer.
IRA VECINAL
Habitantes de Chivería exigieron castigo severo contra los ladrones de tapas metálicas, sujetos generalmente conectados con chatarreros, condenando al mismo tiempo la alcahuetería de las autoridades, pues en reiteradas ocasiones, la policía los detiene y a los pocos días “siguen chingando su puta madre”, afirmó doña Marcelina Velasco Carlín, quien también sufrió la desdicha de haberse fracturado la pierna al dar un mal paso en un registro abierto.
Informaron que tan solo en octubre contabilizaron al menos el robo de 40 tapas metálicas que pesan hasta 80 kilos, lo que equivale a 3.2 toneladas de hierro fundido, que luego comercializan en las distintas bodegas de chatarra situadas en la periferia de la ciudad.
Por ello, exigieron a los diputados locales, hacer modificaciones al Código de Procedimientos Penales, para imponer sanciones más severas tanto a los ladrones así como a los compradores de metal, “adictos” a adquirir mercancía robada.
Con información de agencia Infored.