JERUSALÉN – Israel ha retirado a sus negociadores de Catar, uno de los mediadores en los esfuerzos en curso para asegurar un nuevo alto el fuego entre Israel y el grupo islamista Hamas en Gaza. La decisión se produce después de un estancamiento en las negociaciones, según informó el gobierno israelí.
Según un comunicado de la oficina del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, el jefe del Mossad, David Barnea, instruyó a su equipo en Doha a regresar a Israel tras un estancamiento en las conversaciones. El comunicado alega que Hamas no cumplió con su parte del acuerdo, que incluía la liberación de todos los niños y mujeres según una lista proporcionada y aprobada por los islamistas.
En respuesta, Hamas afirmó haber propuesto un “intercambio de prisioneros y ancianos” y la entrega de los cuerpos de rehenes “que perdieron la vida en los bombardeos israelíes” en Gaza. Sin embargo, según informes, Israel, que ya había decidido reanudar la agresión, no respondió a estas propuestas.
El reciente quiebre ocurrió solo dos días después de que Israel y Hamas violaran un alto el fuego negociado por Catar, Egipto y Estados Unidos. Este acuerdo anterior implicaba la liberación de 105 rehenes secuestrados por el grupo islamista (81 israelíes y 24 extranjeros) a cambio de 240 palestinos prisioneros en cárceles israelíes, todos mujeres y menores.
El cese al fuego, en vigor desde el 24 hasta el 30 de noviembre, brindó una breve pausa en las hostilidades del conflicto que comenzó el 7 de octubre, permitiendo la entrega de ayuda humanitaria a la devastada Franja de Gaza. La situación actual agrega otra capa de complejidad a las ya tensas relaciones entre Israel y Hamas, con las perspectivas de un alto el fuego duradero pareciendo cada vez más inciertas.