El fabricante chino de vehículos eléctricos, BYD, ha reducido a tres estados mexicanos la lista de posibles ubicaciones para su nueva planta de producción que abastecerá al mercado de América Latina. Jorge Vallejo, director general de BYD en México, informó que la decisión se tomará entre aquellos estados que ofrecieron los mejores incentivos para la inversión, aunque no reveló los nombres de los finalistas.

Sin embargo, fuentes cercanas al proceso han señalado que los estados de Nuevo León, San Luis Potosí y Puebla son los principales contendientes. Estos estados han presentado atractivas propuestas que incluyen ventajas fiscales, facilidades en la gestión de terrenos y precios preferenciales.

Stella Li, jefa regional de BYD para las Américas, había adelantado en mayo que la planta tendría una “ubicación central” en el país. Aunque aún no se ha determinado qué modelos se fabricarán en esta nueva instalación, la planta mexicana no abastecerá al mercado estadounidense, según declaraciones anteriores de la compañía. Esto podría estar relacionado con las presiones del gobierno estadounidense, que llevaron al gobierno federal mexicano a suspender incentivos para los fabricantes chinos de vehículos eléctricos.

Nuevo León, uno de los estados en consideración, ya es un centro de producción automotriz, recientemente mencionado por su asociación con Tesla para una posible megafábrica, aunque esto fue desmentido por el gobierno federal. Por otro lado, San Luis Potosí alberga la producción de vehículos eléctricos de BMW, mientras que Puebla cuenta con la presencia de Volkswagen desde hace décadas.

En paralelo a estas negociaciones, BYD sigue expandiendo su presencia en el mercado mexicano. Este miércoles, la compañía lanzó su SUV híbrida enchufable Song Pro en Ciudad de México, con un precio inicial de 599,880 pesos, marcando su segundo lanzamiento en el país en los últimos meses.

La decisión final sobre la ubicación de la planta de BYD en México es esperada con gran expectativa, ya que consolidará la posición del país como un hub clave para la producción de vehículos eléctricos en la región.