RAÚL DOMÍNGUEZ/FIRMASMX

Acuñó un político veracruzano la sabía frase: ❞𝐞𝐥 𝐚𝐭𝐫𝐚𝐜𝐨 𝐥𝐨𝐬 𝐮𝐧𝐢𝐨́ 𝐲 𝐞𝐥 𝐛𝐨𝐭𝐢́𝐧 𝐥𝐨𝐬 𝐝𝐢𝐯𝐢𝐝𝐢𝐨́❞ y eso, precisamente ocurrió en el municipio de Sayula de Alemán entre la alcaldesa 𝐋𝐨𝐫𝐞𝐧𝐚 𝐒𝐚́𝐧𝐜𝐡𝐞𝐳 y su cabildo, al acusarse mutuamente de pretender saquear las arcas, culpando a grupos delictivos y de paso a embarrar al empresario citrícola 𝐄𝐫𝐚𝐬𝐦𝐨 𝐕𝐚́𝐳𝐪𝐮𝐞𝐳, quien hoy se dice arrepentido de haber apadrinado a esta fémina.

A juzgar por los vídeos que el mismo difundió en sus redes sociales, el primer arrepentido de haber apoyado ¿económicamente? ¿O de que otra forma? A 𝐋𝐨𝐫𝐞𝐧𝐚 𝐒𝐚́𝐧𝐜𝐡𝐞𝐳 ha sido en efecto 𝐕𝐚́𝐳𝐪𝐮𝐞𝐳 𝐆𝐨𝐧𝐳𝐚́𝐥𝐞𝐳, quien con una impresionante red de información fue el primero en develar que la presidenta municipal había auto secuestrado a su hijo.

Paralelamente funcionarios e integrantes del cabildo encabezados por el síndico 𝐁𝐚𝐫𝐭𝐨𝐥𝐨 𝐆𝐫𝐚𝐣𝐚𝐥𝐞𝐬 𝐋𝐚𝐠𝐮𝐧𝐞𝐬 delataban a la alcaldesa de haber viajado a Ciudad de México para retirar 10 MDP, acción que la misma institución no le permitió al carecer de la autorización del tesorero.

De ahí, transcurrieron casi 20 días, hasta que una vez pillada, la munícipe retornó victimizándose y custodiada de la Guardia Nacional lo hizo 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐝𝐞𝐬𝐩𝐞𝐝𝐢𝐫 𝐮𝐧𝐢𝐥𝐚𝐭𝐞𝐫𝐚𝐥𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐚𝐥 𝐭𝐞𝐬𝐨𝐫𝐞𝐫𝐨, 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐫𝐚𝐥𝐨𝐫 𝐲 𝐬𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐲 𝐝𝐢𝐫𝐞𝐜𝐭𝐨𝐫 𝐝𝐞 𝐨𝐛𝐫𝐚𝐬 𝐩𝐮́𝐛𝐥𝐢𝐜𝐚𝐬, demostrando total ignorancia de la ley orgánica.

La normatividad legal establece que para que un alcalde pueda despedir a estos funcionarios, debe contar con la aprobación mayoritaria del cabildo, ordenándole al Secretario convocar a sesión de cabildo, esto jamás ocurrió, porque después de todo este sainete, 𝐧𝐚𝐝𝐢𝐞 𝐞𝐧 𝐞𝐥 𝐩𝐚𝐥𝐚𝐜𝐢𝐨 𝐦𝐮𝐧𝐢𝐜𝐢𝐩𝐚𝐥 𝐥𝐞 𝐝𝐢𝐫𝐢𝐠𝐞 𝐥𝐚 𝐩𝐚𝐥𝐚𝐛𝐫𝐚 𝐚 𝐒𝐚́𝐧𝐜𝐡𝐞𝐳 𝐕𝐚𝐫𝐠𝐚𝐬.

Más allá que los argumentos de esta abogada, sean ciertos o falsos en relación a las amenazas de las que dice ser víctima, un hecho es innegable: ese ayuntamiento enfrenta hoy por hoy el más tenso clima de ingobernabilidad y 𝐞𝐥 𝐂𝐨𝐧𝐠𝐫𝐞𝐬𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝐄𝐬𝐭𝐚𝐝𝐨 𝐝𝐞𝐛𝐞𝐫𝐢́𝐚 𝐢𝐫 𝐚𝐧𝐚𝐥𝐢𝐳𝐚𝐧𝐝𝐨 𝐚 𝐥𝐚 𝐛𝐫𝐞𝐯𝐞𝐝𝐚𝐝 𝐮𝐧𝐚 𝐬𝐨𝐥𝐮𝐜𝐢𝐨́𝐧, 𝐚𝐧𝐭𝐞𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐞𝐥 𝐩𝐮𝐞𝐛𝐥𝐨 𝐬𝐞 𝐞𝐧𝐜𝐚𝐫𝐠𝐮𝐞 𝐝𝐞 𝐡𝐚𝐜𝐞𝐫𝐥𝐨.

Frente a esta cruda realidad, en 𝐒𝐚𝐲𝐮𝐥𝐚 𝐝𝐞 𝐀𝐥𝐞𝐦𝐚́𝐧 no solo el ganadero y productor de limón 𝐄𝐫𝐚𝐬𝐦𝐨 𝐕𝐚́𝐳𝐪𝐮𝐞𝐳 ha demostrado rabia y desencanto, sino decenas de miles de habitantes, que hoy expresan a gritos su decepción y lamentan no haber llevado a la alcaldía a 𝐘𝐮𝐥𝐢 𝐒𝐚𝐧𝐜𝐡𝐞𝐳 quien durante 4 años al frente del DIF demostró liderazgo, sensibilidad y amor por los más desposeídos.

Concluimos con otra frase muy sabía: 𝑳𝒐𝒔 𝒑𝒖𝒆𝒃𝒍𝒐𝒔 𝒕𝒊𝒆𝒏𝒆𝒏 𝒆𝒍 𝒈𝒐𝒃𝒊𝒆𝒓𝒏𝒐 𝒒𝒖𝒆 𝒎𝒆𝒓𝒆𝒄𝒆𝒏.

𝐒𝐮𝐞𝐫𝐭𝐞 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐥𝐚 𝐨𝐭𝐫𝐚 𝐬𝐚𝐲𝐮𝐥𝐞𝐧̃𝐨𝐬.